Receta fácil y rápida
En varias ocasiones subestimamos que todos conocemos los entresijos de la cocina y a veces no es tan sencillo, sobre todo si es la primera vez que cocinas. La realidad no es otra que en algunos casos nunca hemos cogido una sartén y menos aún nos hemos puesto manos a la obra con los fogones. Por ello os traemos una receta muy sencilla y fácil, que podéis hacer sin problema, seta de cardo salteada con ajo y cayena.
Existen variaciones más extensas o incluso guisos, pero para empezar, esta es la forma más sencilla de elaborar nuestras setas de cardo o Pleurotus eryngii salteadas con un par de dientes de ajo y un trocito de cayena.
O como diría mi abuela ¡hacemos unas setas al ajillo! Nunca pude resistirme a salir a buscarlas para ver la cara de ilusión que tenia al ver el contenido de la cesta. Comencemos con esta receta tan sencilla y tradicional.
Ingredientes
- 250-300 g de seta de cardo. ( Si son más mucho mejor).
- 2 dientes de ajo.
- 1 trozo de guindilla o una cayena pequeña.
- Aceite de oliva virgen extra (AOVE).
- Sal.
- Pimienta Negra.
- Nuez moscada.
Elaboración
PASO 1: Limpiar y trocear las setas de cardo.
Comenzamos por limpiar los tallos o pies de las setas que hemos recolectado para que no tengan arena con un paño húmedo*, también repasamos los sombreros por si quedara algo que no limpiamos al recogerlas.
* No es recomendable sumergirlas en agua o lavarlas bajo el grifo porque pierden el sabor, pero si fuera necesario tampoco pasa nada por un poco de agua.
Una vez limpias las troceamos en laminas, no demasiado finas para que no se quemen al saltearlas y lo más parecidas en tamaño. Con esto tendremos una cocción uniforme.
Reservamos las setas de cardo laminadas en un bol.
PASO 2: Preparamos la sartén, los ajos y la guindilla.
Preparamos una sartén mediana de unos 24 cm y echamos un buen chorro de de AOVE. Mientras calentamos el aceite a fuego medio, pelamos un par de dientes de ajo, los laminamos con un cuchillo y a la sartén junto con la cayena.
Una vez estén dorados y empiecen a bailar los ajos es el momento de añadir las setas laminadas a la sartén. También es buen momento de retirar la cayena para no perder el sabor de las setas por el picante.
PASO 3: El toque perfecto.
Una vez añadidas las setas a la sartén salpimentamos y las tapamos, de esta manera conseguiremos que se cocinen todas por igual. Pasados unos minutos que hayan soltado todo el agua, las destapamos, añadimos un poco de nuez moscada y subimos el fuego.
Una vez que ya no quede agua y las setas hayan reducido su tamaño solo nos queda sacarlas del fuego, un plato y a ¡Disfrutar de nuestra receta de seta de cardo salteada!
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