ᐅ Quiche de Níscalos (Rovellons)

HISTORIA DE LA QUICHE

Derivada de la quiche francesa de Lorraine os traemos nuestra sencilla receta de quiche de níscalos, que no os decepcionará en absoluto. Pero antes aprendemos un poquito de historia que nunca viene mal.

Esta tarta salada surge en la región de Lorena en el noroeste de Francia, en su capital Nancy más o menos en el 1605. Se elabora principalmente vertiendo una mezcla de huevos batidos con verduras cortadas, algo de carne (panceta, jamon, beicon) y crema de leche sobre una masa quebrada.

Ingredientes

1 paquete de pasta brisa o masa quebrada
1 brick (200ml) de nata para cocina, crema fresca o leche evaporada.
400-500 g de níscalos. (Si son recién cogidos mucho mejor).
200g Panceta, jamón en dados o beicon. (También se puede omitir si la receta la queremos vegetariana)
4 huevos de gallina de corral (siempre que sea posible).
2 puerros medianos o si no dispones de ellos una cebolla grande.
Aceite de oliva virgen extra (AOVE).
Sal, pimienta y nuez moscada.

Elaboración de nuestra Quiche de níscalos

En tan solo tres sencillos pasos cocinaremos nuestra exquisita receta.

PASO 1: Preparamos la masa quebrada.

Preparamos un recipiente para horno con un poquito de aceite para que no se quede reseca la masa. Extendemos la masa quebrada en nuestro recipiente, la pinchamos con un tenedor y la metemos en el horno unos 10 minutos mientras se va calentando hasta los 180º.

PASO 2: Preparamos el sofrito y salteamos los níscalos.

Lavamos y preparamos los níscalos* cortandolos en dados o porciones pequeñas. Disponemos una sarten grande, con un buen chorro de AOVE a fuego bajo, mientras picamos el beicon y los puerros.

Subimos el fuego, añadimos el beicon para que suelte su jugo y a continuación los puerros picaditos. Una vez tengamos pochado el puerro añadimos los níscalos a la sarten y salpimentamos.

¡No os olvideis de la masa quebrada que esta en el horno!

*Si no sabes como limpiar los níscalos o es tu primera vez, puedes consultarlo en esta receta Níscalos al ajillo.

PASO 3: El toque perfecto.

Mientras se hacen un poquito los rovellons, batimos los huevos, con la nata, sal y una pizca de nuez moscada, apagamos el fuego, vertemos la mezcla en la sartén y vertemos todo en el molde, que previamente hemos sacado del horno.

Lo volvemos a meter en el horno durante 10-15 minutos hasta que se cuaje bien la quiche y a disfrutar de nuestra receta. ¡Buen provecho!